El museo acogerá, del 20 de julio al 5 de noviembre, una selección de obras maestras relacionadas con la bebida regional, a la que se sumarán prensas y objetos del sector y una original recreación de una plantación
La sidra convertida en arte invadirá el Museo de Bellas Artes de Asturias entre el 20 de julio y el 5 de noviembre. Una exposición organizada por la Cátedra de la Sidra de Asturias y el Consejo Regulador de la DOP » Sidra de Asturias», con el apoyo de la Dirección General de Patrimonio del Principado, reunirá una veintena de obras y alguna escultura alusivas al proceso de elaboración o al consumo de la sidra en Asturias. Habrá, además, tres relevantes piezas artísticas que nunca han sido expuestas y numerosos objetos y material gráfico relacionados con la cultura sidrera.
La exposición se organiza como parte del plan de salvaguarda de la cultura sidrera incluido en la candidatura que España presentará ante la UNESCO para declarar en 2024 la cultura sidrera asturiana como «Patrimonio Inmaterial de la Humanidad». La muestra ocupará la Planta -1 del edificio Ampliación, donde habitualmente se celebran las exposiciones temporales. Pero no solo eso. Habrá una instalación, ideada por el diseñador Juan Jareño, que recreará una pumarada en las escaleras de ese ala del Museo. Será una plantación muy original pues estará elaborada «con trozos de pumaradas extraídas de distintas obras de arte», indica el historiador Luis Benito García, director de la Cátedra de la Sidra y promotor de la candidatura a la UNESCO. Además, entre las piezas que se expondrán estará un pequeño llagar cedido por Sidra Castañón y las maquetas de lagares –apretón, sobigañu y pesa– hechas por el artista José Legaspi y que están en el Muséu del Pueblu D’Asturies.
La exposición de la Planta -1 estará dividida en cinco bloques, uno por sala. Una de ellas mostrará obras alusivas a la producción manzanera, otra sobre la elaboración, otra dedicada a las espichas y, finalmente, habrá una reproducción de un chigre urbano. «Y también musealizaremos los baños: la sidra siempre tuvo un componente diurético importante», apunta Luis Benito García.
Para la realización de esta exposición, García formó un equipo de trabajo de distintos expertos en historia del arte en el que se integraron Mar Díaz, Jorge Uría, Juan Carlos Aparicio y Gretel Piquer, que actúa también como comisaria. Además, en el catálogo se contará con la aportación de Manuel Rodríguez Álvarez-Buylla. Buena parte de las piezas proceden de los fondos del Muséu del Pueblu D’Asturies (carteles, etiquetas, jarras, vasos y botellas), así como de la colección del Museo de Bellas Artes de Asturias. También hay aportaciones del Museo Antón de Candás, del Museo Evaristo Valle y Museo Piñole, ambos de Gijón; así como del Museo Reina Sofía, que cederá para la exposición la obra «Primavera», que ahora está depositada en el Museo Nicanor Piñole de Gijón. En el catálogo habrá también obras de la colección de la Fundación Cajastur. También han contribuido a la muestra distintos particulares, así como la Asociación de Sidra Tradicional de Asturias (que ha aportado un duernu y mayos) y Sidra Castañón, que prestará el llagar que se expondrá en el vestíbulo.
Una cuidada selección de obras
Entre las obras que se expondrán figuran, firmadas por Evaristo Valle, las siguientes: «A la puerta del lagar», «La merienda. Demetrio el guapo en la taberna» , «Romería en la aldea”» y «El indiano y su familia en la romería». De Valle también se expondrá el lienzo «Adán y Eva/El paraíso terrenal» y un boceto para el cartel de los festejos de Gijón de 1906. Formará también parte de la exposición «En el lagar», de Mariano Moré, un artista que también estará representado por las obras «Romería de Granda» y «El lagar. Haciendo sidra». Otras de las obras expuestas serán: «Filandón en el Monasterio de Hermo», de Luis Álvarez Catalá, «Una fiesta en la aldea. Romería asturiana», de Ignacio León y Escosura; «A la hierba», de José Purón Sotres, y el bronce «Fin de la romería» del escultor Antón. Además, habrá tres obras de Nicanor Piñole: «Primavera», «En la barraca» y «La recogida de la manzana».
